viernes, 25 de diciembre de 2009

FILOSOFÍA: Las principales falacias argumentativas

Una falacia es un razonamiento lógicamente incorrecto, aunque psicológicamente pueda ser persuasivo. Cabe aclarar que un razonamiento falaz no necesariamente posee una conclusión falsa; así como un razonamiento correcto o válido no necesariamente tiene una conclusión verdadera.

A continuación una lista de las 30 principales falacias, las cuales señalaré a mis lectores cuando las incurran con el fin de dinamizar mejor los intercambios:

1. Argumento de la falacia o ad logicam: Asume que si un argumento es una falacia entonces su conclusión debe ser forzosamente falsa. Una falacia lógica no es necesariamente errónea en su conclusión, aunque sí lo es en el razonamiento que le ha llevado a esta conclusión.
Ejemplo: “Cometiste una falacia al intentar demostrar que Dios existe. Por lo tanto, Dios no existe”.

2. Confirmación sistemática o afirmación de la consecuencia: Es el equivalente lógico a asumir la verdad necesaria de que lo inverso también lo es. Es llamada así porque erróneamente se concluye que el segundo término de una premisa consecuente establece también la verdad de su antecesora.
Ejemplo: “Si estoy dormido tengo los ojos cerrados, entonces si tengo los ojos cerrados debo estar dormido”.

3. Negación del antecedente o implicación vacua: Esta falacia dice que si se niegan los antecedentes entonces se negará también la consecuencia.
Ejemplo: “Si estoy dormido tengo los ojos cerrados, pero si estoy despierto tengo que estar con los ojos abiertos”.

4. Falacia de verdad a medias: Las verdades a medias son frases engañosas y falsas, que incluyen algún elemento de verdad. Las frases pueden ser parcialmente verdad pero no toda la verdad del conjunto lo que produce un engaño provocado por omisión. El propósito de las medias verdades o verdades a medias es hacer parecer algo que solo es una creencia como un conocimiento o verdad absoluta. Una verdad a medias embauca al receptor presentando algo que es creíble y usando esos aspectos de la idea que pueden ser demostrados verdaderos como buena razón para creer que la idea o declaración entera es verdadera. Una persona engañada por una verdad a medias podrá considerar la proposición o declaración como una verdad absoluta y actuar en consecuencia.
Ejemplo: “No eres más que un pecador”.

5. Falacia de arreglo del bulto: Consiste en asumir que las cosas que con frecuencia han sido agrupadas por tradición o cultura en un conjunto deberían estar siempre agrupadas de ese modo.
Ejemplo: “Usted califica de injusto al capitalismo. Por tanto, usted es un comunista”.

6. Falacia de falso dilema: Implica una situación en la cual solo dos puntos de vista son sopesados como las únicas opciones, cuando, en realidad, existen una o más opciones que no han sido consideradas. Las dos alternativas presentadas suelen ser, aunque no siempre, los puntos extremos del espectro de ideas.
Ejemplo: “¿Eres capitalista o socialista?”.

7. Falacia de probar con ejemplo: Es una falacia lógica donde uno o más ejemplos se dice «prueban» un caso más general.
Ejemplo: “He visto a los brasileños jugar muy bien al fútbol, por consiguiente todos los brasileños juegan muy bien al fútbol”.

8. Falacia cum ergo propter hoc: Afirma que dos eventos que ocurren a la vez tienen necesariamente una relación causa-efecto. Se expresa de la siguiente manera: si ocurre A y correlacionadamente después ocurre B entonces A ha causado a B. Esto es una falacia lógica porque existen al menos otras cuatro posibilidades: 1) que B sea la causa de A; 2) que haya un tercer factor desconocido que sea realmente la causa de la relación entre A y B; 3) que la relación sea tan compleja y numerosa que los hechos sean simples coincidencias y 4) que B sea la causa de A y al mismo tiempo A sea la de B, es decir, que estén de acuerdo, que sea una relación simbiótica.
Ejemplo: “Ingresé a la Universidad porque tenía una pata de conejo el día que di el examen”.

9. Falacia de causa simple: Asume que existe solo una simple causa para un resultado cuando en realidad puede haber un conjunto de causas que lo hayan provocado. Tiene paralelo con la "navaja de Ockam" que en su aplicación puede crear una relación espuria debido a que la respuesta puede ser más compleja o existe una explicación aún más sencilla pero que se desconoce. 
Ejemplo: “La gente es pobre porque no quiere trabajar”.

10. Falacia del huevo y la gallina o de circularidad entre causa y consecuencia: Es una falacia lógica donde la consecuencia de un determinado fenómeno es llamada a ser también la causa principal.
Ejemplo: En una entrevista de trabajo: “Usted es muy calificado, pero no podemos darle trabajo ya que no posee experiencia”, dice el entrevistador. “¿Y cómo voy a tener experiencia si no me dan el trabajo?”, contesta el entrevistado.

11. Falacia de petición de principio o petitio principii: Es una falacia que ocurre cuando la proposición a ser probada se incluye implícita o explícitamente entre las premisas de las que parte el razonamiento. Es más sutil cuando el razonamiento tiene una longitud adecuada como para hacer olvidar al receptor que la conclusión ya fue admitida como premisa.
Ejemplo: “La materia es lo único que existe. Dios no es material. Por lo tanto, Dios no existe”.

12. Falacia de pregunta compleja: En ella el mero hecho de responder la pregunta implica presuponer en la respuesta algo que no se quiere asumir como cierto. La finalidad de dicha falacia es que el adversario dialéctico asuma en su contestación alguna información que no se quiere conceder bien por falsa o bien porque dicha concesión perjudica gravemente la argumentación que pretende sostener.
Ejemplo: “¿Todavía golpeas a tu esposa?”.

13. Falacia de causa falsa o non sequitur: Asume que si un acontecimiento sucede después de otro, el segundo es consecuencia del primero. Es verdad que una causa se produce antes de un efecto pero la falacia viene de sacar una conclusión basándose sólo en el orden de los acontecimientos. Es decir, no siempre es verdad que el primer acontecimiento produjo el segundo acontecimiento.
Ejemplo: “El gobierno subió los impuestos antes de que se produjera la inflación. Por tanto, dichos impuestos causaron la inflación”.

14. Falacia de argumento a la consecuencia o argumentum ad consquentiam: Concluye que una premisa es verdadera o falsa basándose en si esta conduce a una consecuencia deseable o indeseable. Es una falacia porque basar la veracidad de una afirmación en las consecuencias no hace a la premisa más real o verdadera.
Ejemplo: “Dios debe existir, porque si no existiera no habría moral y el mundo sería horrible”.

15. Falacia de argumento por la fuerza o argumentum ad baculum: Es un argumento donde la autoridad, fuerza, coacción o amenaza de fuerza es dada como justificación para una conclusión.
Ejemplo: “Si usted no acepta mis razones se va de esta empresa”.

16. Falacia del punto medio o de la moderación: Supone que la conclusión más válida o certera es la que se encuentra siempre como compromiso entre dos puntos de vista extremos. Es posible que lo considerado como extremo es en realidad el hecho cierto. Esta falacia viene del hecho de que con frecuencia una posición intermedia o moderada suele ser correcta.
Ejemplo: “Unos dicen que Dios existe, otros lo niegan. Entonces voy a ser agnóstico”.

17. Falacia tu quoqueSe basa en que la premisa o consejo presentado por una persona es falsa porque esta misma persona no la sigue.
Ejemplo: “Thomas Jefferson decía que la esclavitud estaba mal. Pero, él mismo tenía esclavos. Por lo tanto su afirmación es falsa y la esclavitud está bien”.

18. Falacia de argumento contra el hombre o argumentum ad hominem: Consiste en replicar al argumento atacando o dirigiéndose a la persona que realiza el argumento más que a la sustancia del argumento.
Ejemplo: “Usted está equivocado porque usted es un imbécil”.

19. Falacia de hombre de paja de blanco móvil: Generar un “hombre de paja” es crear una posición fácil de refutar y luego atribuir esa posición al oponente para destrozarlo. En realidad el argumento real del oponente no es refutado sino el argumento ficticio que se ha creado. El nombre viene de los hombres de paja que se usan para entrenar en el combate y que son fáciles de abatir. Lo mejor que se puede hacer es destruir al hombre de paja fabricado por el oponente antes de que él lo haga.
Ejemplo: “Usted acaba de afirmar que el Estado debería intervenir en la economía. Entonces, está de acuerdo con la nacionalización de toda la economía, lo cual es absolutamente inadmisible pues destruiría por la libertad de empresa”.

20. Falacia de hipótesis ad hoc: En filosofía y ciencia, ad hoc significa con frecuencia la adición de hipótesis corolarias o ajustes a una teoría filosófica o científica para salvar la teoría de ser rechazada o refutada por sus posibles anomalías y problemas que no fueron anticipados en la manera original.
Ejemplo: “Tal vez el factor económico no sea el determinante directo de todos los acontecimientos históricos pero al menos hay que aceptar que es el que los determina en último término”.

21. Falacia argumento dirigido a la ignorancia o argumentum ad ignorantiam: Es una falacia lógica la cual afirma que una premisa es verdadera sólo porque no ha sido probada como falsa o que la premisa es falsa porque no ha sido probada como verdadera. Esto es una falacia porque la veracidad o falsedad de cualquier afirmación es independiente de nuestro conocimiento.
Ejemplo: “Nadie ha podido demostrar que Dios existe. Por tanto, Dios no existe”.

22. Falacia de argumento a  la mayoría o argumentum ad populum: Es un argumento falaz que concluye que una proposición debe ser verdadera porque muchas personas lo creen así. Es decir, recurre a que “si muchas personas lo creen así, entonces será así”. En ética el argumento falaz sería “si muchos lo encuentran aceptable, entonces es aceptable”. El mero hecho de que una creencia esté ampliamente extendida no soporta o no la hace necesariamente correcta o verdadera. La veracidad o falsedad de una afirmación es independiente del número de personas que creen en ella.
Ejemplo: “¿Por qué no quieres que tengamos sexo? ¡Todo el mundo lo hace!”.

23. Falacia de apelación a la autoridad o argumentum ad verecundiam: Esta falacia lógica consiste en basar la veracidad o falsedad de una afirmación en la autoridad, fama, prestigio, conocimiento o posición de la persona que la realiza.
Ejemplo: “Esto debe ser verdad porque lo dijo Stephen Hawking”.

24. Falacia de la tradición o argumentum ad antiquitatem: Es una falacia lógica típica en la que una tesis es proclamada como correcta basándose en que ésta ha sido tradicionalmente considerada correcta durante mucho tiempo. En definitiva, “esto es correcto porque siempre se ha hecho de esta manera”. Este argumento hace dos suposiciones: 1) que la antigua manera de pensar fue probada como correcta cuando se introdujo (lo cual puede ser falso, ya que la tradición puede estar basada en fundamentos incorrectos); 2) que las razones que probaron este argumento en el pasado son actualmente vigentes para hoy. Si las circunstancias han cambiado esto puede ser falso. Por otro lado, esta falacia también asume que mantener el statu quo es preferible o deseable ante la posibilidad de un cambio, lo cual puede ser también incorrecto.
Ejemplo: “Desde hace siglos que hemos confiado en la física newtoniana ¿por qué tendríamos que hacerle caso a ese chiflado de Einstein”.

25. Falacia dos errores hacen un acierto: Es una falacia lógica que ocurre cuando se asume que si un error es cometido, otro error podrá cancelarlo. La falsedad o equivocación en un comentario o acción no hace más necesario, loable o racionalmente prudencial realizar otro acto equivocado en represalia.
Ejemplo: “El comunismo es malo. Por tanto, el capitalismo es bueno”.

26. Falacia del accidente: Se comete al confundir la esencia con el accidente, lo sustancial con lo adjetivo.
Ejemplo: “La religión ha sido causa de muchas guerras a lo largo de la historia. Por tanto, la religión es mala”.

27. Falacia del continuum: Consiste en asumir que pequeñas diferencias en una serie continua de sucesos son irrelevantes o que posiciones extremas, conectadas por pequeñas diferencias intermedias, son la misma cosa porque no podemos establecer un límite objetivo para el cambio. Sus dos formas más famosas fueron planteadas por Eubílides de Mileto en los ejemplos del trigo (“¿Dos granos de trigo hacen un montón de trigo? –No. - ¿Y añadiendo otro grano? –Tampoco. - ¿Y añadiendo otro? –Luego nunca habrá un montón, mientras se añadan uno por uno”) y del calvo (“Si a alguien que no es calvo se le quita un pelo, no queda calvo; si se le quita otro, tampoco; y así, nunca será calvo”).
Ejemplo: “No podemos saber con certeza cuánto dinero hay que quitarle a un rico para considerarlo como pobre, de lo cual se sigue que es imposible determinar las diferencias entre ricos y pobres y, por tanto, la pobreza no existe”.

28. Falacia genética: Consiste en descalificar una determinada creencia por la forma en que se origina.
Ejemplo: “Tu crees en el cristianismo únicamente porque tus papás te lo inculcaron de pequeño. Por tanto, el cristianismo es falso”.

29. Falacia Taxi Cab: Consiste en descartar arbitrariamente la necesidad de explicación de algo una vez que se llega al destino deseado.
Ejemplo: “Soy materialista, por tanto creo que la materia no necesita más explicación que ella misma”.

30. Falacia de argumentum ad náuseam: Se da cuando se pretende imponer la verdad de algo por el solo hecho de repetirlo muchas veces y/o de muchas formas.
Ejemplo: “Miente miente, que siempre algo queda”.